El
autor universal de la partida inicial de la Revolución de la Modernidad con
obra celebre Azul, escrita en prosa poética, estilo de los más celebres
manifestantes de la palabra como López de Vega, Garcilaso y Góngora, fue proclamado
por Víctor Hugo, como un beso paternal a la creación prosística fue dado por Oscar Wilde y José Martí para
este camino literario.
Acogió
el seudónimo de Rubén Darío, fue un nicaragüense prensador con matices
orientales con deferentes conjuraciones para la época que él vivió, a Ciento
Cuarenta Nueve Años de la aparición pública de su obra maestra Azul en
Valparaíso Chile. Don Juan Valera tesorero mayor de lengua, expreso en un
tiempo que según lo dicho por Clarín en España, sólo se cuenta a dos poetas y
medio insignes como son: Campoamor, Núñez de Arco, Bécquer.
Se
ha dicho que en toda revolución del cambio se dese de encontrar siempre en el
campo espiritualidad. Manchada o no con ríos de sangre, como se dijera en La
Enciclopedia Marx y Engels, bajo el lema de Sufragio Directo y no Reelección,
así que Bolívar se dio la tarea de destruir con su pluma la cadenas del
Lenguaje Escolarizado de la península en su serie de cartas, proclamas y
manifiestos, hasta que estos tuvieran una influencia profética.
Este
ensayo el poema en prosa con sagacidad de delirios, pero nunca desprendiéndose
del Romanticismo de Aloyus Bertrand, Baudelaire, Rimbaud, Verlaine, estos
renuevan la Concepción del poema en prosa (Prosa Poética en Otra Cosa), que
como dijo Baralt fueran Idilios, en nuestro país se han encontrados ponentes
sobresalientes de este estilo literario como son: Rafael Cadenas, José Antonio
Ramo Sucre Pérez Bonalde.
Por
otra parte, hay intelectuales que para la época de los años 80, como el Cubano Manuel Pedro González y otros
educadores universitarios del Norte de Latinoamérica, consideraron que el
inicio primigenio de La Revolución Modernista estuvo a cargo de José Martí
calificado como el hijo de Bolívar y padre de Rubén. Carta Magna del
Modernismo. “El Carácter de la Revista
Venezolana” con fecha 15-07-81. Publicada en la Editorial Martiano.
En
la teoría de la prosa artística no encerraba nada más que pintar, esculpir,
moldear, musicalizar, matizar con pinceladas sugerentes de la plástica, sin
dejar en balde la escuela clásica española. Donde se puede citar a la esposa de
Madrid Burgo, Valladolid, la amantes empedernidas de Paris las Mimí.
El
movimiento que dura medio siglo después de la muerte del poeta y renaciera con
la generación del 18, cuyo poema Azul Influenciara grandemente en el Filósofo
Alejandro Korn, ya que no el único color telúrico del movimiento, se hace a
toda la expansión visual del Iris, de la piedras preciosas que nacen del fondo
del vientre preñado de la tierra, en terciopelos, zafios, esmeraldas, rubíes,
ópalos y porcelanas y mármol, se pude encontrar en los cuadros de Fragonard,
Pompeya y Watteau. En mi país Venezuela se puede ejemplificar con el azul del
cielo, con la pureza del mar compuesto por sus islas, riberas y costas, por el
predomino de la lectura en Azul del soneto Salmerón.
A
este bardo no se le puede echar al olvido, no se debe de enterrar en el pasado.
Sigue siendo el Rey del acróstico gastador como Lugones, Chocano, Herrera,
Valencia, Reissig, Antonio Machado, Jiménez, Valle Inclan. En su prosa valía
bien su verso mágico, mustio y resonante. Este año se bañe en Azul, Siempre
Azul proclamado a Pablo Neruda, Cesar Vallejo, García Lorca y Vicente Huidobro,
quienes estos cantores, creadores liricos de la palabra hecha poesía,
considerándolo el más grande Genio Literario que nos ha dado este hemisferio
Hispanoamericano.